Cómo Conseguir Que Los Fondos Negros Sean (De Verdad) Negros
Seguro que más de una vez has intentado conseguir un fondo negro para alguna de tus fotos, ¿verdad? Puede que quisieras hacer un retrato o te hayas aficionado a la fotografía de objetos, o incluso a la publicitaria. Y es muy posible también, que después de comprarte una flamante cartulina-tela negra, hayas colocado tu protagonista delante, hayas hecho la foto y te hayas dado cuenta de que en realidad, ese fondo que tú ves tan, tan negro, en tu imagen no lo sea ni remotamente. Puede que gris oscuro sí, pero negro, negro, no.
Y es una pena, porque los fondos negros nos permiten resaltar y contrastar el sujeto principal, y son muy elegantes, ¿a que quieres uno? Vamos a ver cómo hacerlo.
¿Por qué no consigo que mi fondo sea negro?
Es curioso que teniendo un fondo negro no consigas plasmarlo en tu foto, ¿verdad? Lo que básicamente pasa cuando no conseguimos un fondo negro, es que la iluminación del primer plano (sujeto principal) y el segundo plano (fondo o luz ambiente) no están bien diferenciadas. Es decir, principalmente están demasiado cerca la una de la otra y acaban mezclándose.
Esto puede ser por varios motivos:
- El primer plano y el fondo están demasiado cerca.
- El flash tiene demasiada potencia y acaba iluminando ambos planos.
- En definitiva, porque las iluminaciones de ambos planos son demasiado parecidas.
Soluciones y ajustes para conseguir que tu fondo sea negro
- Aleja el sujeto principal (primer plano) del fondo todo lo que puedas, así evitarás que el flash lo ilumine.
- Si no puedes alejar el fondo o aun así no aparece lo suficientemente negro, prueba a acercar más la fuente de luz al sujeto principal o primer plano, así necesitarás menos potencia del flash para iluminar el primer plano y consecuentemente llegará menos iluminación al fondo.
- Cierra el diafragma para tener menos luz ambiente y el sujeto principal bien enfocado (más profundidad de campo). El sujeto principal lo iluminarás con el flash.
- Reduce el tiempo de exposición para apagar el fondo.
- Utiliza una ISO baja, así conservarás una buena calidad de imagen y tendrás menos luz ambiente.
- Trabaja en RAW, de este modo podrás reajustar o acabar de afinar los ajustes que necesites para mejorar tu imagen.
En definitiva, todos los esfuerzos deben centrarse en oscurecer el fondo e iluminar el primer plano. Cuanta más diferencia haya entre uno y otro, más oscuro tendrás el fondo.
Material necesario
Este tipo de imágenes están pensadas para trabajar con flash, ya que controlar su destello e intensidad es más fácil que si lo hacemos de otro modo. No obstante, es posible lograrlo siempre que consigas suficiente diferencia de iluminación entre el primer plano y el fondo.
- Flash externo: Es con el que conseguirás mejores resultados, ya que podrás controlar la potencia o la direccionalidad del destello.
- Flash integrado: No te permite controlar la direccionalidad del destello, por lo que ésta siempre será frontal.
- Fuente de luz continua: Si no tienes flash, puedes hacerlo con alguna fuente de luz continua como una lámpara de mesa o incluso una linterna.
- Fondo oscuro: Si bien ayudará a conseguir un fondo negro, no es imprescindible. Siguiendo los pasos anteriores y siempre que consigas suficiente diferencia entre luces y sombras, podrás conseguir fondos negros incluso con aquellos que no lo son. Aunque toda ayuda es poca, así que si dispones de uno, no dudes en utilizarlo.
Edición
Si tienes una buena base y has conseguido un buen resultado en la imagen original, podrás acabar de perfeccionar tu imagen en la edición con buenos resultados. Dependiendo de la imagen podrás:
- Oscurecer las sombras
- Aumentar el negro
- Aumentar el contraste
- Realizar ajustes en las luces
- Aumentar o reducir los blancos
- Retocar la exposición
- La saturación
Resumiendo
El motivo principal por el que, a pesar de tener un fondo negro, no conseguimos plasmarlo en nuestras imágenes, es porque hay demasiada luz ambiente que llega a ese fondo o, dicho de otra forma, la luz del primer plano (que es la que nos interesa exponer correctamente) y el segundo, son demasiado parecidas. A partir de esta reflexión, lo que tenemos que hacer, es conseguir que la diferencia de luz entre el primer plano y el segundo sea elevada. Esto lo haremos intentando apagar el fondo, a través de la apertura de diafragma (cerrando para que entre menos luz), de la velocidad (más elevadas para permitir una menor entrada de luz), separando primer plano del fondo para que el flash no lo ilumine, o acercando más la fuente de luz al primer plano (para que este tampoco ilumine el fondo).
Y recuerda, si hay suficiente diferencia entre la luz del primer plano y el fondo, ni siquiera necesitarás un fondo oscuro para conseguir que éste sea negro. Sé que suena algo extraño, pero cuando hagas la prueba según los parámetros verás cómo consigues un maravilloso fondo negro incluso sin disponer de él.
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